Seguro que muchos os preguntáis lo que es un cigarro o cigarrillo electrónico. ¿Qué es la parte electrónica? En realidad, el cigarro electrónico no contiene tabaco, sino que es un contenedor con una batería que genera vapor. La batería calienta un líquido y lo convierte en vapor. La solución puede tener aromas o nicotina líquida, pero esto varía según el modelo. Ya en 1968 Herbert A. Gilbert presentó su “cigarrillo sin tabaco sin humo”. Sin embargo, fue en el 2003 que se dió a conocer el cigarrillo electrónico por su inventor chino Hon Lik. Después el cigarrillo electrónico ha tenido mucho éxito y buena aceptación.
El cigarro electrónico desechable
Lo que hoy en día se conoce como cigarrillo electrónico es el cigarrillo electrónico recargable, que se carga con líquidos. Para los fumadores, esto puede llegar a ser muy pesado. Es más agradable sacar el cigarrillo electrónico del paquete y fumarlo al instante. Esto se puede hacer con el cigarro electrónico desechable.
Ezee ofrece cigarros electrónicos desechables que ya están cargados con el líquido. Estos cigarros electrónicos desechables equivalen a 400 caladas o 40 cigarrillos convencionales. Se sacan del paquete y ya están listos para usar. Son ligeros, porque sólo pesan 10 gramos. Una vez usados, se pueden tirar.
Ventajas del cigarro electrónico desechable
Una gran ventaja que tienen los cigarros electrónicos desechables sobre los recargables es que son más baratos. Un paquete de cigarrillos convencional cuesta 4 a 5 € y lleva 20 cigarrillos. Un cigarro electrónico desechable de Ezee corresponde a 40 cigarrillos y cuesta desde 4,36 €. Esto significa un ahorro del 100%.
Si quieres dejar de fumar, el cigarro electrónico desechable es ideal, porque no tienes la tentación de recargar. Se puede ir quitando el hábito de fumar gradualmente, usando el cigarrillo recargable en dosis cada vez más pequeñas. Al final se puede usar el cigarro electrónico desechable y así no se cae en la tentación.
¿Has usado alguna vez un cigarro electrónico desechable? ¿Qué te ha parecido?